Un día mis padres me llevaron al parque Warner en Madrid. Había una casa que parecía la casa encantada y entramos para echar un vistazo. Yo tenia mucho miedo y no quería entrar porque era pequeño, pero al final me obligaron mis padres. Había muchos cuadros raros con telarañas que lo cubrían por completo, parecía que estaba abandonada. Mi padre vio una luz extraña y misteriosa y se acercó. Yo también fui con el. Al final vimos una cola muy larga y mi madre le preguntó a un hombre alto y delgado que iba con su hijo que era mas o menos de mi misma edad, que si esto era la casa encantada. El señor le dijo que era la casa encantada pero de Scooby Doo. Me lo pasé muy bien en la atracción. Era un coche que iba recorriendo la casa y había ruidos extraños como carcajadas tenebrosas y truenos. Yo, mi madre y mi padre teníamos que disparar con unas pistolas de juguete que iban conectadas a el coche, a fantasmas que aparecían proyectados en las paredes.
Que chulo es tu blog (Dani)
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